En la entrada del barrio Gregorio Álvarez, en la esquina de Castelli y Dr Ramón se acumulan aguas servidas que desembocan en el alcantarillado pluvial.
Los vecinos plantean que la obra está mal hecha, y que debido a la acumulación de líquidos cloacales generan inconvenientes a los transeúntes y a quienes esperan el colectivo en la parada que se encuentra en dicha esquina..
Además lo que se plantea es que como ya se está acercando el verano, si no resuelven el problema, el olor a cloacas será aún más fuerte.
