Alertados por un fuerte olor nauseabundo, vecinos del Barrio Gregorio Álvarez decidieron llamar a la policía para saber que sucedía dentro de una casa.

Una vez en el lugar, los uniformados logran entrar a la vivienda, y se encuentran con quien sería dueño de la casa, que vivía solo, muerto en el sillón del living.

Según las primeras investigaciones, se trataría de una persona de unos 60 años aproximadamente.

Las primeras pericias indican que habría fallecido de muerte natural, pero están analizando todas las opciones para descartar que haya sido una muerte violenta.

En ese sentido, la policía provincial representada por el inspector Corzo, detalló que en la jornada de hoy van a realizarle la autopsia al cuerpo para determinar fehacientemente como ocurrió el fallecimiento.

En el barrio aseguran que se trata de un vecino con un padecimiento mental que lo mantenía aislado.

*Foto Gentileza Rigo Castaño.