La empresa Kaiser SA realizó un reclamo judicial por las tierras ubicadas en Collón Curá y Salto Grande.

Las tierras estaban en situación legal irregular y durante 20 años estuvieron ocupadas por familias. Funcionaban locales comerciales y también viviendas que levantaron los propios ocupantes.

“Esta mañana fui a llevar a la nena al jardín y cuando volví mi casa estaba llena de policías, no pude entrar más, sacar nada”, dijo María, una de las vecinas.

A los ocupantes les habían avisado que los iban a desalojar. La notificación llegó el año pasado y comenzaron gestiones para ser identificados como barrio popular e impedir el desalojo.

La empresa Kaiser SA regularizó la escritura y reclama su derecho del espacio. Las edificaciones son precarias en algunos casos pero no son los que tienen valor sino la tierra. El lugar es un sector comercial en el corazón de la zona oeste.

La policía montó un operativo que implicó el corte de la calle Collón Cura y un despliegue de gran cantidad de efectivos policiales.

Al mediodía se esperaba que las vecinas pudieran hablar con la jueza María Eugenia Grimau, a quien se denunció por su intervención en la causa judicial de la cooperativa ADOS, en un jury de enjuiciamiento que finalmente declaró inadmisible la denuncia.

“Nos dejaron todas nuestras cosas adentro, no nos dejan sacar nada, no tenemos donde ir”, dijo una vecina desesperada.

La ley de barrios populares protege a las personas que ocuparon tierras en forma ilegal. “Nos iban a dar el certificado ahora, pero se ejecutó el desalojo el mismo día”, dijo María.