Ayer se realizó la última audiencia del juicio por la muerte del joven Agustín Guisolfo, quien fuera asesinado en agosto de 2020.
La fiscalía sostuvo su acusación de homicidio simple y descartó la posibilidad de que se tratara de una acto de legítima defensa.
“En estos días de audiencia logramos acreditar que fue una muerte violenta, que el autor es el imputado y que fue una conducta típica, antijurídica y culpable”, sostuvo la fiscal Carolina Mauri, y señaló que el 23 de agosto de 2020, luego de una situación violenta, el imputado agredió con un elemento a la víctima y la mató.
Como se recordará los hechos ocurrieron en la toma Casimiro Gómez en medio de una pelea entre amigos y que Morales intervino cuando no era partícipe.
Luego de escuchar a la fiscalía y la defensa, el tribunal a cargo de juzgar el asesinato dará a conocer el veredicto el próximo lunes.